viernes, 5 de septiembre de 2014

Adios a las Vacaciones en paz: regreso a casa de los niños saharauis





Si por algo se caracterizan las despedidas es por ser difíciles. En ellas, la madurez juega un papel muy importante y, en ocasiones, hasta admirable. Y más si a lo que toca decir adiós es un niño que, durante todo el verano, se ha convertido en un miembro más de la familia. La explanada de El Arenal fue el escenario para la partida del grupo de niños saharauis que llegaron a Córdoba el pasado mes de junio para pasar unas vacaciones con su familia de acogida. Sin embargo, lejos de sentirse tristes, se mostraban contentos porque, a fin de cuentas, «el campamento se había acabado y volvían a casa». «Tengo ganas de ver a mi madre», aseguraba Mohamed, uno de los niños saharauis.

Quizás el papel más duro lo encarnaban los «padres» de dos meses. Este era el caso de Ángela Aguilera que por tercer año consecutivo, acogía a Shidadme. «Es un sentimiento mezclado entre felicidad y tristeza pero, sin duda, merece la pena poder ayudar a estos niños», aseguraba esta madre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario