La asociación citrícola Palmanaranja se mostró pesimista en cuanto a lo que queda de campaña de recogida de fruta, puesto que el consumo ha bajado a mínimos en el último mes y, por este motivo, apenas se pueden defender los precios.
El presidente de Palmanaranja, Antonio Aguilar, informó de que en la primera parte de la campaña, el periodo comprendido entre los meses de octubre y febrero, hubo consumo suficiente como para garantizar un mínimo de rentabilidad en el sector. Sin embargo, continuó, "desde el mes pasado, el mercado se muestra apático" lo que hace que se estén viviendo momentos complicados y nos tengamos que conformar con las migajas".
Aun así, Aguilar confió en que el mercado se reactive en pocos días, tal y como ocurrió en las mismas fechas del año pasado, si bien no ocultó su miedo a que "el calendario pase inexorablemente" y no se vea un cambio de tendencia en este ecuador de la campaña.
Palmanaranja explicó también que este descenso del consumo de naranjas no está justificado por la calidad de la fruta, ya que, en todas sus variedades, es la "correcta". Es más, subrayó que está aprovechando sus buenas calidades organolépticas para aumentar las exportaciones respecto a la temporada anterior que, en el primer semestre del año pasado llegaron a alcanzar los 23,4 millones de euros.
Esta situación se produce a pesar de que la delegación de Agricultura de la Junta informara de que en el primer aforo de la naranja, realizado el pasado mes de octubre, se había producido un aumento del 14,9% de la producción respecto a la campaña anterior, hasta llegar a las 283.000 toneladas aproximadamente. Sobre los bajos precios, Agricultura insistió en la necesidad de aunar la oferta para llegar fuertes a los mercados nacionales e internacionales, de mejorar la comercialización y en la promoción de la marca de garantía Naranjas del Valle del Guadalquivir.
El presidente de Palmanaranja, Antonio Aguilar, informó de que en la primera parte de la campaña, el periodo comprendido entre los meses de octubre y febrero, hubo consumo suficiente como para garantizar un mínimo de rentabilidad en el sector. Sin embargo, continuó, "desde el mes pasado, el mercado se muestra apático" lo que hace que se estén viviendo momentos complicados y nos tengamos que conformar con las migajas".
Aun así, Aguilar confió en que el mercado se reactive en pocos días, tal y como ocurrió en las mismas fechas del año pasado, si bien no ocultó su miedo a que "el calendario pase inexorablemente" y no se vea un cambio de tendencia en este ecuador de la campaña.
Palmanaranja explicó también que este descenso del consumo de naranjas no está justificado por la calidad de la fruta, ya que, en todas sus variedades, es la "correcta". Es más, subrayó que está aprovechando sus buenas calidades organolépticas para aumentar las exportaciones respecto a la temporada anterior que, en el primer semestre del año pasado llegaron a alcanzar los 23,4 millones de euros.
Esta situación se produce a pesar de que la delegación de Agricultura de la Junta informara de que en el primer aforo de la naranja, realizado el pasado mes de octubre, se había producido un aumento del 14,9% de la producción respecto a la campaña anterior, hasta llegar a las 283.000 toneladas aproximadamente. Sobre los bajos precios, Agricultura insistió en la necesidad de aunar la oferta para llegar fuertes a los mercados nacionales e internacionales, de mejorar la comercialización y en la promoción de la marca de garantía Naranjas del Valle del Guadalquivir.
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