JUAN PABLO BELLIDO
La pedanía del Llano del Espinar, enclavada en el corazón de la Sierra de Montilla, aprovecha cada año la celebración de sus fiestas estivales para reunir a un avezado comité de expertos que valora la graduación, el peso y el estado sanitario de los mejores frutos del marco vitivinícola. El presidente de la cooperativa La Aurora, Juan Rafael Portero, y el técnico del Consejo Regulador, Juan Portero, inspeccionaron ayer los cerca de cincuenta racimos que concurrieron a la decimonovena edición del Concurso Comarcal de Racimos de Uva, mientras que Francisco Bujalance, patrocinador de la iniciativa, los iba pesando en una balanza.
El primer premio, dotado con 150 euros en metálico, fue para el joven viticultor Francisco Javier Rosa, que localizó en el Llano de Cabra un racimo de uvas que pesó 4.328 gramos, registrando además 11 grados Baumé, todo un récord histórico para este concurso. La subcampeona, María del Carmen Hidalgo, recolectó un ejemplar de 4.143 gramos y 10,5 grados. El tercer premio fue para un racimo de uva tinta que pesó 3.359 gramos presentado por Soledad Maqueda.
El portavoz del jurado, Juan Rafael Portero, destacó que el concurso ofrece "unos parámetros que indican cómo va a ser la vendimia que acaba de comenzar". En ese sentido, incidió en que "la calidad de los racimos augura una magnífica campaña en la zona Montilla-Moriles
"
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